domingo, 11 de septiembre de 2011

38 Años Después... 10 Años Después de un Fatídico 11-S

Hoy es una efeméride muy funesta por ambos lados, por Chile y por Estados Unidos. 38 años después del Golpe de Estado que terminó de manera violenta con el Gobierno de Salvador Allende Gossens. 10 años después del atentado a las Torres Gemelas que conformaban el World Trade Center de Nueva York. Por ser cifra redonda, ese último 11-S está acaparando mucha atención por parte de los medios, pero no debemos olvidar las consecuencias que dejó el otro Once, el que inició un período oscuro en nuestro país y que se extendió por 17 años. En la Casa Matriz, reseño lo que ha sucedido en cada uno de estos 11-S.

CHILE, MARTES 11 DE SEPTIEMBRE DE 1973...

El clima político y social estaba muy tenso, con el General Carlos Prats ya depuesto de su cargo y el asesinato de Arturo Araya Peters, el Edecán Naval del Presidente Allende. Las radios Minería y Agricultura emitieron a las 8:42 a.m. la primera proclama golpista, en la que los jefes supremos de las Fuerzas Armadas instaban a Allende a entregarle inmediatamente su cargo a la Junta de Gobierno. Estos cuatro responsables de la proclama eran Augusto Pinochet, Gustavo Leigh, José Toribio Merino y César Mendoza, y los dos últimos recién habían tomado las jefaturas supremas de sus respectivas ramas, Armada y Carabineros respectivamente. Junto con esa proclama, le mandaron un ultimátum al Presidente Allende: Si no desaloja La Moneda antes de las 11, "será atacada por tierra y aire".

Eran las 10:15 y a través de la Radio Magallanes emite su último mensaje el Presidente Allende. Este último extracto de su discurso definió la consecuencia y el poder de la oratoria que tenía el mandatario:
"¡Trabajadores de mi Patria!: Tengo fe en Chile y en su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo donde la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán de nuevo las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor. ¡Viva Chile!, ¡Viva el pueblo!, ¡Vivan los trabajadores!
Éstas son mis últimas palabras, teniendo la certeza de que mi sacrificio no será en vano. Tengo la certeza de que, por lo menos, habrá una sanción moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición." 
El audio de este último discurso fue rescatado para la posteridad por el periodista Hernán Barahona, antes que los militares se tomaran la Radio Magallanes. Barahona murió a los 71 años el 15/06/2008, cuando era director de la Radio Nuevo Mundo.

A las 10:30 abrieron fuego los tanques contra La Moneda, recibiendo respuesta de los miembros del GAP (Grupo de Amigos Personales de Allende) apostados en edificios aledaños. Patricio Carvajal, quien sería Ministro de Defensa en el régimen militar, contactó a Pinochet y quedaron de acuerdo en realizar la segunda parte de su plan: bombardear el Palacio Presidencial con ayuda de los aviones, entre ellos los conocidos Hawker Hunter. El ataque aéreo a La Moneda se completó con la invasión por parte de los militares y el ataque a la residencia ubicada en calle Tomás Moro, donde estaba Hortensia Bussi (la querida Tencha), la esposa del Presidente Allende. Ante esta situación, Allende tomó su fusil AK-47 (regalo de su amigo Fidel Castro) y se disparó en la barbilla. Este deceso fue informado, alrededor del mediodía, a la Junta Militar, entidad que se tomó el poder para iniciar el período conocido como Dictadura Militar, aunque hayan textos que hablen eufemísticamente de "Pronunciamiento Militar". Se persiguió, torturó y ejecutó a quienes se declararan opositores al régimen, y otros/as miles están desaparecidos/as. Unos/as miles se pudieron salvar mediante el exilio o la clandestinidad hasta que terminaran esos 17 años del terror.

Si bien no alcancé a nacer en ese entonces (yo soy del 14 de Noviembre de 1981), me he informado sobre el Golpe y sus nefastas consecuencias a través de mi familia y textos que me sirvieran como fuentes confiables. Mi hermana Paz (prima por parte materna, biológicamente) fue la primera en nacer para la Dictadura, tres meses después del Golpe. La última que nació en medio de ese período fue mi hermana Natalia, en 1984. Y considero que ese Golpe Militar abrió una herida que aún sigue fresca en la memoria colectiva chilena, por más que sectores ligados a la Derecha intenten hacer olvidar lo sucedido hace 38 años.

ESTADOS UNIDOS, MARTES 11 DE SEPTIEMBRE DE 2001...

A miles de kilómetros de acá, miembros del grupo Al-Qaeda secuestraron cuatro aviones de pasajeros desde el Aeropuerto Internacional de Boston, el Aeropuerto Internacional Washington-Dulles y el Aeropuerto Internacional Libertad de Newark, todos con destino a California. Los secuestradores pilotaban los aviones con intenciones de cometer un atentado suicida a las Torres Gemelas del World Trade Center y el Pentágono. El primero de los aviones despegó a las 8:00 a.m. (hora local de verano para el Este de los EE.UU.), y el último a las 8:41.

El atentado comenzó con el vuelo 11 de American Airlines, un Boeing 767 con 92 personas a bordo, impactando la Torre Norte (o Torre 1) del World Trade Center, a las 8:46:30. Mientras las cámaras de televisión reporteaban el incendio en este edificio, el vuelo 175 de United Airlines iba en dirección a la Torre Sur (o Torre 2). El ya mencionado vuelo, un Boeing 767 con 65 personas a bordo, embistió a la Torre 2 a las 9:02:59. El Presidente de ese entonces, George W. Bush, es informado a las 9:07 que Estados Unidos se encuentra bajo ataque. Ordenan cerrar túneles y puentes de Manhattan, y se prohíbe el despegue de los vuelos civiles. Pero los ataques estuvieron lejos de cesar: justamente a las 9:37:46 el vuelo 77 de American, un Boeing 757 con 64 personas a bordo, se estrelló contra el Pentágono. A las 9:59 se derrumba la Torre Sur, y unos minutos después, 10:28, cae la Torre Norte. El cuarto avión secuestrado, un Boeing 757 con 44 personas a bordo, correspondiente al vuelo 93 de United, se estrelló en un campo abierto en Shanksville, Pennsylvania, a las 10:03:11.

El conteo de fallecidos fue por miles, exactamente fueron 2.992 víctimas fatales, contando los pasajeros y los 19 secuestradores de los cuatro vuelos mencionados. En el World Trade Center fallecieron 2.602 personas y desaparecieron 24, mientras que en el Pentágono murieron 125 personas. El Departamento de Salud informó en 2002 que entre los fallecidos en el atentado a las Torres Gemelas hubo 247 latinos, un 9% del total. De éstos, 15 eran de República Dominicana, 18 de Colombia, 13 de Ecuador, 6 de Cuba, 4 de Argentina y uno de Chile. Y según la Comisión del 11-S, habían 16.000 personas en las zonas de impacto del complejo del World Trade Center, de las cuales sobrevivió la mayoría, gracias a las labores de evacuación antes del derrumbe de las Torres.

¿Dónde estaba yo ese Martes 11 de Septiembre de 2001? Estaba yo, de 19 años en ese entonces, en clases en el Preuniversitario Cepech (hoy Cpech) de Esquina Blanca, en Maipú. Mi profesor de la Prueba Específica de Matemáticas contaba este hecho en clases, y yo pensé que no era cierto. Hasta que llego a mi casa, tipo 2 de la tarde, y veo la tele. Sí, eso me convenció de que era cierto. Y más adelante, en el periódico The Clinic, que se convirtió en mi lectura recurrente hasta ahora, me enteré de una "lista negra" de canciones prohibidas por el Gobierno a los DJs radiales. Algunas por nombrar: las que tuvieran palabras como fuego (Disco Inferno de The Trammps), cielo (Stairway to Heaven de Led Zeppelin, Lucy in the Sky with Diamonds de The Beatles, Knockin' on Heaven's Door de Bob Dylan), el día Martes (Ruby Tuesday de The Rolling Stones), dejarse caer (Free Fallin de Tom Petty & The Heartbreakers), polvo (Another One Bites the Dust de Queen, Dust in the Wind de Kansas), muerte (Live and Let Die de Paul McCartney & Wings), Nueva York (New York, New York de Frank Sinatra), Estados Unidos (American Pie, Don McLean), vehículos voladores (Rocket Man de Elton John) o el Islamismo (Peace Train y Morning Has Broken de Cat Stevens, llamado Yusuf Islam desde 1978), entre otras. Y también censuraron todo el repertorio de Rage Against the Machine y canciones de paz como Imagine de John Lennon o What a Wonderful World de Louis Armstrong. Esa censura fue una de tantas huellas posteriores al 11-S, junto con la paranoia que instauró Bush Jr. con la "guerra preventiva".

Después de esta doble reseña del 11-S, sólo pido paz por quienes han muerto o desaparecido en Chile y Estados Unidos. A esas miles de personas que serán recordadas por sus familias cada día desde que ocurrieron esos fatales hechos. Que nada empañe la memoria colectiva para contar lo sucedido a las próximas generaciones.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hay quienes dicen que el pasado hay que dejarlo de lado de una vez...por desgracia, si ese pasado no es claro, se debe de despejar para poder avanzar con certeza y no cometer los mismos errores.

Del año 1973, decir que el 11/9 fue el corolario de un proceso derivado de errores propios de gente en el Gobierno y de conspiraciones malévolas y alimentadas desde el extranjero por los intereses yankees. Quizás era inevitable la salida de Allende...pero se hizo rompiendo toda decencia democrática.

Y de lo sucedido en Estados Unidos, hay quienes insisten de forma vehemente en la teoría del complot o el auto-atentado...no creo en esas corrientes, pero sí estimo que no se hizo lo suficiente para ir juntando las piezas del puzzle previo y, para compensar, la respuesta fue desproporcionada.

Lo de las canciones censuradas parecía una reacción más salida del estómago que de una mente equilibrada...podría haberse entendido si fuese venida de las mismas radios, pero que el Gobierno lo "recomendase" era demasiado. De hecho, esa situación aceleró la pausa de años para Rage Against The Machine, pero otros grupos como Anthrax siguieron adelante sin cambiar su nombre.

Buena reseña, Musa Inspiradora. Besos...Te Quiero Mucho.